En 1996 Dana Carvey había salido de SNL tras varias temporadas muy exitosas siendo parte de una de las generaciones más míticas del, de por sí mítico, programa cómico de los EEUU. Y se le ocurrió que quería hacer un show de sketches cómicos, o sketch comedy como se le conoce en el gringo.
Así nació The Dana Carvey Show, un malogrado milagro que se propuso rebasar todos los límites que hasta ese momento se habían impuesto en la televisión norteamericana. Y todo sonaba a éxito, pero fue tal el afán de desconcertar al respetable e invitarlos a una dimensión donde drama, comedia y locura eran más o menos inseparables, que tan sólo duró una temporada. No es de extrañarse, en el primer episodio Bill Clinton amamanta gatitos.
Sin embargo este show marcó a toda una generación y formó a algunas de las personalidades más importantes de la risa gringa, y por lo tanto del mundo. ¿Quiénes? Pues nada más y nada menos que a Steve Carell, Bill Chott, Stephen Colbert, Elon Gold, Chris McKinney, Heather Morgan, Peggy Shay, Robert Smigel, James Stephens III, Louis C.K, Charlie Kaufman, Jon Glaser, Dino Stamatopoulos, Spike Feresten y Robert Carlock. Todos ellos, en ese momento perfectos desconocidos, ahora son piezas fundamentales del entretenimiento del día a día.
Tristemente The Dana Carvey Show fue cancelado rapidamente. Un fracaso total para algunos; escuela y vocación para otros. Lo que sí sabemos es que nada volvió a ser igual tras este intento de llevar el arte contemporáneo a la pantalla chica.