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#CrónicaInmamable. Apolo: El guardián del rock en México

- Por: helagone

Por Gabriel Gómez Hernández
@Chico_Calavera
Fotos de Alfredo Padilla Barberi
@padre_de_todo
Durante mucho tiempo he escuchado a las personas de mi generación decir desconsoladamente que el rock en México ha muerto, que ya no hay bandas que suban al escenario y lo enciendan, que los sonidos del “hard rock” han sido olvidados y sustituidos por melosos sintetizadores y letras fáciles de digerir.
Me apena decir que yo he pensado lo mismo; a pesar de que la propuesta en nuestro país se ha diversificado y que ahora tenemos la oportunidad de conocer muchos y novedosos sonidos, la mayoría de las veces estos están lejos de lo que la gente como yo conoce como rock.
No es que sean malas bandas, malas letras o mala música; es más bien que hay quienes disfrutamos de otro tipo de sonido. Yo, igual que mucha gente, gusto del llorar de las guitarras estridentes, de las figuras de bajo que te recuerdan que ese instrumento también existe, de baterías veloces y potentes, de letras que son completamente subjetivas y que no necesariamente son de fácil interpretación para el que escucha.
En este tenor descubrí a Apolo.

Un día, hablando con un amigo, le pedí que me recomendara bandas de rock hechas en México, pero que en verdad sonaran a rock. La respuesta fue contundente: “Escucha a Apolo, esos weyes son la banda que hace rock en México.”
Resulta complicado que una aseveración tan grande provenga de una persona imparcial, supuse que ese productor de radio recibía payola o de plano era un “fan from hell”. Sin embargo, hubo razón en sus palabras.
Descargué el E.P homónimo de Apolo y me encontré con esas guitarras que hacía mucho no escuchaba, me encontré con una banda que tenía un sonido completamente “rocker” y con una particularidad más: sus letras eran en español.
Sonaba demasiado bello para ser verdad, pero lo era. El cuarteto de Chihuahua logra combinar el sonido de las bandas setenteras, con la estética y la temática actual. Apolo es de las pocas bandas que pueden conectar con un público muy joven y con uno no tanto como yo.
Hace poco me enteré de que los oriundos de Chihuahua iban a presentar su primer L.P: Guardián. La noticia a todas luces me pareció una bomba, ya que con el tiempo (7 años) se han ganado un lugar como una de las bandas jóvenes más reconocidas de la escena a nivel nacional e internacional. Esto ya sea por presentarse con mucho éxito en bares o pequeños foros o en grandes festivales abriendo a importantes bandas internacionales.
Los chicos de Apolo son sumamente sencillos, creo que esa fue una de las primeras cosas que me agradaron. Posteriormente su apertura a hablar de absolutamente todo lo que se les pregunta, especialmente de música, desde luego. Ellos no tienen miedo a expresarse de sí mismos y de otras bandas.
En una oportunidad que tuve para charlar con ellos, me contaron a mí y a un grupo de amigos acerca de las vicisitudes que han sufrido para que su primer L.P viera la luz. A veces resulta increíble lo que uno puede ver en el escenario y las increíbles historias que preceden a las presentaciones. Me gustaría contarles un par de los relatos que me contaron Albar (voz) y el Zurdo (guitarra), pero eso será en otro momento. Ahora me gustaría hablarles de Apolo en vivo.
Disidente fue la banda encargada de abrir el toquín. Ellos son una agrupación de culto en su estado natal, Jalisco, cuentan con varios éxitos en su haber. A pesar de que a mi parecer, son una de las bandas más despreciadas y mal tratadas del rock en México. Hace algunos años fueron de los pioneros en intentar volver a las raíces del rock sin que se les dieran las oportunidades suficientes. Los de la perla tapatía “la rompieron” ante un público que se les entregó al 100%

Antes de las 12 de la noche (si la memoria no me falla) Apolo saltó al escenario a dejar claro por qué es una banda que está destinada a volverse importante en la escena nacional.
Dentro de la artillería estuvieron todos los éxitos que les conocemos. Una de las más esperadas por el público fue “Siddhartha”, tema con el que lograron abrirse muchas puertas en el medio hace algunos años.
Entre olor a cuero y alcohol, el respetable se dejó llevar por el dios de la adivinación y la música. Los caminos sinuosos del rock y de los riffs fueron por los que transitamos durante la noche del miércoles sin importar que muchos fuéramos Godínez y que había que trabajar en unas horas. Nos llevaron entre el mundo de “Fariseo” y Loco (Lowiame Ju), para también sentirnos un “Lobo estepario”.
Dejaron claro que a este material le pusieron todo lo que se necesita: amor, talento, empeño y rock.

De Apolo puedo contarles cosas, puedo decir lo que pienso, puedo recomendarlos. La realidad es que estos chicos son toda una experiencia que solamente puede ser vivida de primera mano, tanto en vivo, como en estudio.
Así pues fue presentado el disco de la banda, entre gritos y sudor. Entre cerveza y olor a cuero.
Apolo es una banda que ha sido paciente, que no ha desesperado, que no ha dejado lo que les gusta hacer sólo por ganar un poco de dinero. No son una banda que se traicione ni que traicione a las personas que los han seguido.
Apolo es la banda que será el guardián del rock mexicano por muchos años más. Así sea.