Lo cierto es que se puede decir mucho del personaje que hoy cumple años. Su nombre es Syd Barrett y la tinta (o las lucesitas en la pantalla) ha corrido sin control hablando de él.
Nació un 6 de enero de 1946. Unos años después lo invitaron a una banda y tomó posesión absoluta de ella, incluso la nombró: Pink Floyd. El resto es historia. Estos muchachos de Cambridge se pusieron locos a jugar con luces, tocar pesado y darle duro al ácido. De esta primera aventura juvenil no sobrevivió el muchacho dorado que hoy recordamos. Tras un atasque premeditado el poeta se perdió en sí mismo.
Para algunos su brevísimo tiempo frente a los reflectores es un momento fundamental en la historia del Rock, para otros sólo fue la antesala para que naciera una de las bandas más importantes de la historia. Incluso hay quien piensa que lo más importante que logró este amigo fue volverse loco y salirse de la agrupación. Cada uno decide.
Sin embargo, aquí en NoFM, no podemos dejar de celebrar su extraña y muy peculiar aventura por la música. Ya sea porque es fundamental para comprender a un gigante, ya sea porque sus letras e intención melódica sigue sorprendiendo, muy a pesar de su brevedad. Quién puede decirlo, ¿es mejor una larga carrera o ser un cristal en fuego que se consume con violencia?
A 69 años de su nacimiento les compartimos su historia con este documental:
https://www.youtube.com/watch?v=EvXuxHgAvo8&index=1&list=PLTzRH1KYMptTKd0fgRJ25gxSHvjdO6tsR
Y les anunciamos que a las 3 pm, en su ya conocido #DateLas3, escucharemos The Early Singles de Pink Floyd, sin duda el mejor trabajo de este niño que se enamoró del silencio a muy temprana edad.
