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Hola, ¿Cómo Estás? Soy El Fantasma De Daniel Johnston

Daniel Johnston Mugshot

Don’t be sad I know you will
Don’t give up until
True love will find you in the end
“. Daniel Johnston

“No mames, se murió Daniel Johnston” decía el mensaje que tu mejor amigo te envió por el celular. “Verga”, atinaste a responder y la cabeza se te puso en blanco.

El trabajo, la gripe, el desajuste emocional, las dudas y decisiones que tienes que tomar, te distrajeron todo el día de la noticia. Pero algo en ti lo recordó en la noche, acostado y enfermo, con ganas de volverte loco. “Se murió Daniel Johnston”, dijiste y te pusiste a llorar.

“Hoy se murió mi artista favorito”, le dijo el hombre triste a la mujer contenta. “¿Y quién era? ¿Lo querías mucho? ¿Te sientes muy triste?”. El hombre triste contestó todo al revés: “sí, muy triste”, “me hacía sentir que los inadaptados sí podemos pertenecer”, “…pues hasta ahora no puedo decir quién era. Para mí era un ángel con el diablo adentro. Le hacía falta un exorcismo, pero cuando hacía música, era celestial”. La mujer contenta le dijo al hombre triste que le invitaba un helado para que le contara más. Quizá entre ambos descubrirán, mientras comen un helado, que no hay por qué rendirse: la belleza nos encontrará finalmente.

Viste la lista que carroñeramente hizo Spotify, llamada “This Is Daniel Johnston”. ¿Alguien sabe realmente quién era Daniel Johnston? Pensaste que seguro hay gente que sólo lo identifica como “el wey que escribió ‘True Love Will Find You In The End’”. Pensaste si habrá alguien que sólo lo conozca como “el wey que le hizo una playera a Kurt Cobain”. Pensaste si alguien lo conoce como “ah, el wey que estaba loco”. Pensaste en si alguien lo conocerá como “el artista incomprendido”. Pensaste en su familia y si realmente lo conocieron o sólo capas de él. Pensaste en Laurie y si ella que conoció su lado más tierno, ahora mismo estaría llorando y diciéndole que siempre lo amó. Pensaste mucho. Pensaste quizá demasiado. Pensaste y no llegaste a nada. Volviste a llorar. ¿Quién chingados fuiste, Daniel Johnston?

R.R. mira el póster de Daniel Johnston que está colgado en su cuarto. Escucha ‘Some Things Last A Long Time’. Escucha la voz del hombre que está en el póster. Escucha la letra que canta la voz del hombre que está en el póster. “Your picture / Is still / On my Wall / I think about you…”. No lo puede creer. Piensa que quizá todo es una broma. Piensa que quizá todo es un chiste. Piensa demasiado. Piensa y no llega a nada. Entonces la voz le canta: “It’s funny / But it’s true / And it’s true / But it’s not funny”. Y se ríe. Y llora. Y entonces se da cuenta que Daniel Johnston era una risa y una energía que en el fondo era un grito de ayuda.

¿Quién chingados fuiste, Daniel Johnston? Para unos, una canción de esperanza. Para tu familia, un infierno en vida. Para tus amigos, una pesadilla y una ternura y un terror y un amor. Para tus fans, un bote de salvación. Para los que no conectaron nunca contigo, un sobrevalorado y sobre dimensionado. Para la gente que te llevó de gira cuando tu cuerpo estaba ahí, pero tu mente y tu alma no, un saco de dinero. Para quienes te defendieron, un hombre que ahora, al fin, puede descansar. Para Gasparín, un nuevo fantasma amistoso que graba saludos desde una cámara casera y le habla al espejo de lo que alguna vez fue y lo que realmente sucedió y todo aquello que jamás se concretó. Para el diablo, un nuevo compañero. Para dios, un nuevo guerrero. ¿Y para ti?  

¿Qué fuiste para ti? ¿Qué voces te dijeron lo que eras cuando tu corazón se reventó? ¿Qué ideas cruzaron tu cabeza cuando se cerraron tus ojos? ¿Qué cosas nunca descubriste de ti? ¿Qué otras querías borrar? ¿Qué le vas a decir a Lennon cuando lo veas? ¿Vas a cuidar a Laurie? ¿Vas a dejar que tu familia descanse? ¿Vas a estar mejor? ¿En verdad vas a estar mejor? Hiciste una promesa con un guiño. Ahora te acercaste a la luz. Ojalá que, finalmente, te encuentres con eso que siempre quisiste… aunque nadie, quizá ni tú, sepa lo que era.

¿Quién chingados fuiste, Daniel Johnston?

“Un ángel que tenía el diablo dentro”.


Israel Pompa-Alcalá@thesmallestboy