Los grupos humanos son tan coloridos como entrañables. Partiendo de la familia y extendiéndose hasta sus límites, más de una persona en un lugar específico ofrece diversión garantizada, y si no es diversión, sí es tragedia, o empatía, o amor. El documental que esta semana les recomendamos justamente habla sobre la magia de las personalidades y los disparates que una pequeña población puede presumirle al mundo.
The Shutka Book of Records, o Knjiga rekorda Sutke, es un película entrañable. Es basicamente un recorrido entre los maravillosos personajes que habitan en Shutka, un diminuto pueblo de gitanos, y demás etnias, en los Balcanes. Lo interesante es que cada uno de estos amigos tiene algo que contar, y cada uno de ellos es el mejor en hacer lo suyo en el mundo, o en su pueblo, que es más o menos lo mismo para ellos. De esta manera podemos encontrar al mejor cazador de vampiros, al mejor entrenador de gansos o al hombre más elegante del mundo. Tal cual.
Esta obra maestra dirigida por Aleksandar Manic y estrenada en 2005, ganó todos los premios que ha podido acumular, y es una de esas obras que cualquier amante de los documentales va a recomendar ante cualquier provocación. Y no está de más. El ejecicio de hora y media, más o menos, se presenta monumental tras haberlo experimentado, y tiene esa cualidad preciosa de hacerte sentir entre amigos y conocidos. Este documental es una celebración de lo que somos fuera de las grandes épicas; de lo que somos en la intimidad, y ante todo, de lo que somos ante los otros, los más cercanos, los que nos aclaran lo que somos en realidad.
Como pueden ver éste es uno de nuestros documentales favoritos de la vida. Y se los recomendamos vehementemente. No dejen de verlo y comiencen a buscar entre sus cercanos los poderes mágicos que los rodean y hacen más ricos.