Decía la semana pasada Manuel Gil Antón que “la infancia viene del latín infans que significa sin voz, sin palabra. Y la etimología no es condena: sí tienen voz y palabra. Pero los adultos no tenemos oídos.” Mamá Coronel no sólo escucha, comparte la voz de aquellos a quienes les han quitado la voz.
Honorine Munyole es coronel de la Policía de la República Democrática del Congo. Está encargada de la protección de los niños y mujeres y la lucha contra la violencia sexual. Su vida y su trabajo forman parte del documental Mamá Coronel, del director Dieudo Hamadi. El documental inicia cuando transfieren de ciudad a Honorine. Su despedida desata entre las mujeres de la ciudad de Bukadu el enojo y frustración al saberse nuevamente vulnerables a la ola de violación que las acecha. Y es aquí cuando surge la primera pregunta: ¿cómo es que la fuerza de un grupo de mujeres recae en una sola?
Desde la austeridad y carencia, Mamá Coronel tiene como responsabilidad asegurar la protección de niños y mujeres en un país en dónde los niños aún son torturados bajo la acusación de ser hechiceros, y la violación sexual es un arma de terror. En un país de carencias sociales, dónde las guerras son tantas que tienen nombres y han dejado heridas que más de una década después siguen sangrando.
Pero este documental no es morboso, el director no está buscando plasmar a Mamá Coronel como el estereotipo de heroína. No la veremos romper en llanto en una entrevista a cuadro mientras relata lo difícil de su trabajo. El documental es el retrato una mujer de carácter fuerte, seria, sin importar si está frente a una víctima o a un potencial victimario. Al ver la situación de género del país intuimos que ella lleva su propia lucha por poder seguir haciendo su trabajo y comandar la brigada siendo mujer.
Honorine Munyole, Mamá Coronel
La importancia del trabajo de Mamá Coronel radica en regresarle el carácter de víctima a quién lo es, sin importar el tiempo transcurrido, sin importar la falta de pruebas. En crear un sistema en dónde la primera reacción de la policía sea la protección. A la par, el documental retrata las difíciles condiciones sociales y políticas en las cuales lleva a cabo su labor, que la obligan a recurrir a la población en búsqueda de recursos. La respuesta que obtiene la mayoría de las veces es la negativa y el reclamo.
“Si hablamos entre nosotras, si nos damos la mano…” dice Mamá Coronel, y le atina al blanco. Aunque en muchos casos ese sea el paso más complicado. El silencio invisibiliza. Los movimientos de los últimos años que propiciaron que las mujeres hablaran de sus experiencias de acoso sexual nos dejaron una lección: no estamos solas, no fuimos las únicas. Para Mamá Coronel no hay abuso de una mujer o un niño que prescriba. Y sin importar que un país se esté cayendo a pedazos, la denuncia, escuchar la voz de quienes han sido calladas, siempre será el inicio de la construcción.
Mamá Coronel forma parte de la Selección Oficial de DocsMX, que se llevará a cabo del 11 al 20 de octubre. Puedes revisar horarios y sedes de exhibición en http://docsmx.org/
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por Mónica Moreno – @moni_morenob