por Rafael Rodríguez
@delorean_nofm
Los saltos cuánticos no sólo nos llevan a la nostalgia musical, bien calibrado el capacitador de flujo podemos estirar el viaje hasta el medioevo; aunque permanezcamos atados a nuestra propia tierra prometida, la CDMX. Nunca jugué juegos de roll, tampoco tuve ni tengo una consola de videojuegos ni una cota de malla junto a mi disfraz de bodas y ponencias. Pero desde adolescente, con mi primer automóvil, una burbuja metálica diseñada en Alemania del siglo pasado, hice constantes viajes en el espacio desde las Lomas de Sotelo hacia el Desierto de los Leones y siempre me pareció que aquel lugar parecía uno copiado de la Edad Media.
Por eso, este domingo 5 de marzo moveremos al Delorean hacia el Mundo Medieval, una excepción a la realidad donde habrá juglares, vikingos y caballeros peleando con armas reales, música, cetrería y, con suerte, cerveza. Esperen próximamente una reseña a la limón de la nostalgia entre Postales y el terciopelo del Delorean. Todo menos miedo.
Más información en www.mundomedieval.mx y aquí