Si están con la claridad que el 19 de enero toca Primus en la CDMX, felicidades, son el pueblo elegido, el conjunto digno, el sano y siempre regulador factor de equilibrio entre el ridículo y el olimpo.
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Así es, el siempre mutable y desorientado trío se presenta en el Auditorio BlackBerry. Todavía pueden comprar sus boletos para Primus en la CDMX y descubrir por qué es una de las experiencias básicas en la vida de cualquier melómano exponerse a el desvarío total de Les Claypool y compañía.
Partamos por el reconocimiento: la banda comenzó en 1986 y no se ha detenido casi nada. Si somos honestos, Primus nació justo cuando debía nacer. Pasada la búsqueda de locos de los sesenta, el mundo sólo se ha permitido la llegada de “otros tipos de talento” a los grandes espectaculares a principios de los noventa. Fueron dos épocas doradas, épocas en donde estar cochino y ser freneticamente original vendía, y vendía mucho. Todos tenemos la fortuna de poder mamar de esa época, y sin ella Primus no hubiera sido posible.
Por lo mismo nos hemos propuesto un recorrido por las décadas para entender qué es lo que podemos esperar de Primus en la CDMX en 2019. Comenzamos con un trío punketo con alma de funk sin control para llegar a la madurez y completa dominación sonora de una banda encanecida y mítica.
Horas de música para disfrutarse, celebrarse y comprender que si no la armas en el escenario, pues no eres banda ni mereces fans.
* OCHENTAS
* NOVENTAS
* DOSMILES
* DOSMILES + 10
Lo sabemos, es otra cosa. Es interesante, provocativo y grosero. Pero así es la música, y por suerte algunos artistas se toman con mucha seriedad el ser consecuentes con su llamado e intención. Todo mundo cambia, algunos se van esfumado, pero los que valen llevan su sonido hasta las últimas consecuencias. Por eso estamos tan emocionados con Primus en la CDMX.