“A Loose-Fish is fair game for anybody who can soonest catch it.” Moby Dick

Si la música se parece al mar, y lo habitamos todos, hay especies raras, que se ven poco y extraña vez son capturadas. Aquí surcamos las olas para hacerlos más evidentes.

Los Jaivas

Por Alan Prats
@al_prats
Si esta columna fuera publicada por algún medio de origen chileno no habría razón para dedicarle una entrada a Los Jaivas, esa increíble banda con un sonido único que, en su país natal, es un ícono de la cultura popular. Sin embargo estamos en México, y a pesar de esa amplia trayectoria y extendido reconocimiento en buena parte de América Latina, Los Jaivas no es un nombre particularmente conocido en nuestro país.
Los Jaivas 1
La primera vez que me enteré de la existencia de Los Jaivas fue justo como un mexicano suele enterarse de su existencia: a través de un conocido chileno. A la postre ese conocido se convirtió en un gran amigo y Los Jaivas en una de mis bandas favoritas de rock progresivo latinoamericano. El sonido que los define es único en su tipo, no hay forma de compararlos porque no existe referente alguno más que el que ellos ha creado: una fusión de folclor andino y ritmos latinoamericanos con rock progresivo y sinfónico.
Los Jaivas 2
La banda fue formada en Viña del Mar en 1963 bajo el nombre de The High & Bass. Conformada por los hermanos Eduardo, Claudio y Gabriel Parra y sus amigos Eduardo “Gato” Alquinta y Mario Mutis, al inicio tocaban música tropical común y corriente, sin mayor diferencia respecto a lo que inundaba la radio chilena por entonces. Pero hacia 1970, ya con su nombre castellanizado como Los Jaivas, comenzaron a redefinir su música orientándose hacia senderos más experimentales, explorando y mezclando la música de raíces latinoamericanas con las improvisaciones propias del lenguaje del rock psicodélico de la época. Fue así como en 1971 grabaron y editaron su primer disco, homónimo pero mejor conocido como El Volantín debido a su portada.
Los Jaivas 3

En esos primeros años de la década de 1970, Chile era gobernado por Salvador Allende, quien fuera el primer presidente de tendencia marxista del mundo en ser elegido democráticamente a través de elecciones generales. En medio de la tensión global derivada de la Guerra Fría, Chile cayó en un profundo abismo de polarización social y política que no tardó en manifestarse de formas violentas. Si bien Los Jaivas no era una banda abiertamente politizada la atmósfera de tensión no les fue ajena, haciendo un llamado a la unidad y la paz entre los seres humanos en su sencillo de 1972 “Todos juntos”, cuyo mensaje claramente iba dirigido al pueblo chileno. El tema se volvió un éxito de forma inmediata y se incluyó en su siguiente álbum lanzado a inicios de 1973, también homónimo pero mejor conocido como “La Ventana” por su característica portada.

Tras el fatídico golpe de estado de 1973, las cosas empezaron a ponerse feas y Los Jaivas decidieron irse de Chile. Se instalaron en Argentina donde ya gozaban de un reconocimiento considerable, logrando así incorporarse con facilidad en la escena local del llamado Rock Nacional. Durante su estancia en Argentina lanzaron Los sueños de América (1974), Los Jaivas (1975, mejor conocido como “El Indio”) y Canción del sur (1977). Fue precisamente en esta época y en estos discos cuando el sonido de Los Jaivas tomó su forma definitiva, logrando el balance perfecto entre folclor latinoamericano y rock progresivo, realizando composiciones cada vez más complejas dotadas de un fuerte simbolismo potenciado por líricas penetrantes.
Los Jaivas 4
En 1976 un nuevo golpe de estado, esta vez en Argentina, obligó a Los Jaivas a buscar un nuevo lugar para vivir y hacer música tranquilamente. En 1977 se trasladaron a Europa y se instalaron en París. En medio de ese creciente interés en Europa y Estados Unidos por lo que empezaba a llamarse World Music, Los Jaivas fueron muy bien recibidos por el público europeo, iniciando así un periodo de intensa actividad y constantes giras por toda Europa que se prolongaría hasta 1981.
Los Jaivas 5
En esos viajes por el viejo continente concibieron la idea de musicalizar la sección “Alturas de Machu Picchu” del Canto general de Pablo Neruda, que se materializó en su disco de 1981 con el mismo nombre. De alta complejidad y arreglos vocales contundentes, este álbum conceptual sobre el pasado de Machu Picchu se erigió como la obra maestra de Los Jaivas, quienes incluso llegaron a grabar una sesión en vivo sin público en las ruinas incaicas para un especial de televisión producido en conjunto por el Canal 13 de Chile y el Canal 7 de Perú, el cual fue presentado por Mario Vargas Llosa.

El concepto de tocar en vivo en unas ruinas arqueológicas sin público quizá nos recuerde el Live At Pompei de Pink Floyd, en donde la banda británica se lució con una íntima e increíble sesión en vivo en las ruinas de Pompeya del antiguo Imperio Romano. Pero lo cierto es que Alturas de Machu Picchu de Los Jaivas es una obra de altísima calidad que no tiene absolutamente nada qué pedirle a Pink Floyd ni a ninguna banda británica de rock progresivo. Sin temor a equivocarme puedo asegurar que Alturas… tiene asegurado su lugar entre los mejores discos conceptuales de la historia.
Los Jaivas 6
A partir de este punto la música de Los Jaivas fue haciéndose progresivamente más progresiva, explotando al máximo y de forma ejemplar la increíble gama de sonidos que brindan la diversidad de instrumentos del folclor latinoamericano. Además del ya mencionado Alturas…, los ejemplos más notables de este periodo son los discos Aconcagua de 1982 y Obras de Violeta Parra de 1984. Como su nombre lo indica éste último se confeccionó a partir de diversas composiciones de la cantautora Violeta Parra, ícono de la cultura chilena.


Con el tiempo el legado de Los Jaivas fue creciendo. No obstante el paso de los años no ha estado exento de desgracias. En 1988 falleció Gabriel Parra y en 2003 el “Gato” Alquinta. A pesar de la terrible ausencia que en distintos momentos significó la partida de ambos, la banda siguió adelante y nos regaló la oportunidad de escuchar otros grandes discos como Si tú no estás (1989), Hijos de la tierra (1995) o el sinfónico Mamalluca (1999). En sus casi 50 años de carrera Los Jaivas se han convertido en símbolo de toda una época y un ícono chileno. Su música ha demostrado que los sonidos propios de América Latina también son hermosos, poéticos, profundos y que al mismo tiempo pueden ser rockeros sin que ello implique perder su esencia. Si tuviera que nombrar una banda de rock que represente una identidad propiamente latinoamericana esa sería sin duda Los Jaivas.

En vivo