Traducción del texto Why I’m Not Really Here For Emma Watson’s Feminism Speech At the U.N., publicado en Black girl dangerous
Por Mia Mackenzie
La actriz Emma Watson, de la saga de películas de Harry Potter, es la nueva embajadora de la buena voluntad por las mujeres de las Naciones Unidas. Ella habló el sábado durante la presentación de la campaña HeforShe (Él por Ella), la cual tiene como objetivo que los hombres participen de alguna forma (la campaña no llama a realizar alguna acción de ninguna clase) para terminar con la inequidad de género. La campaña pretende que los hombres hagan suyo el problema de la equidad de género, y la Srita. Watson les extendió una invitación para ello.
Algunos sitios web feministas tradicionales (blancos) están enardecidos porque, según ellos, fue asombroso y realmente llevó las cosas al siguiente nivel. Sí, algo de ello fue muy bueno. La Srita. Watson habló de cómo se convirtió en feminista, después de experiencias como ser sexualizada por los medios de comunicación a los 14 años de edad. Durante los primeros minutos, el discurso es impresionante.
Después, alrededor del minuto seis, se torna… menos bueno.
Me considero una fan de Emma Watson. Me agrada, siempre me ha agradado. Soy fan de Harry Potter (a pesar de sus conflictos con la inequidad de género), y me ha gustado en otros trabajos también. Aún me agrada. También sé que su trabajo feminista es auténtico, y que tiene las mejores intenciones en las Naciones Unidas. Excelente. Nada de eso es el asunto aquí.
El asunto es que ese mensaje que la Srta. Watson envió es problemático en muchas formas.
En su discurso ante las Naciones Unidas, ella dijo: “¿Cómo podemos incidir en el mundo si sólo la mitad está invitada o se siente bienvenida para participar en la conversación? Hombres, me gustaría aprovechar esta oportunidad para extenderles una invitación formal. El problema de la equidad de género también es suyo.”
Aquí, ella parece sugerir que la razón por la que los hombres no se involucran en la pelea por la equidad de género es que las mujeres simplemente no los han invitado, y de hecho, no les han dado la bienvenida. Las mujeres no les han dado a los hombres una invitación formal, y por eso ellos no se han unido. No es porque, como sabemos, los hombres se benefician enormemente (social, económica, políticamente, y un largo etcétera) de la inequidad de género, y por ello tienen tan poca iniciativa en apoyar para desmantelarla. No es porque la misoginia prevalece en todo el mundo. Sólo es que nadie se los pidió. ¡Por Dios, ¿por qué a nadie se le ocurrió invitarlos?!
Esto es algo absurdo. Las mujeres han intentado que los hombres se preocupen por la opresión de las mujeres desde… siempre. Los hombres no se han interesando desbordadamente en pelear esa batalla porque requiere que renuncien al poder, y toda evidencia indica que esa no es su cosa favorita. ¿Compartir un link acerca de la equidad de género? ¡Por supuesto, cuenten conmigo! ¿Renunciar al poder real en formas reales? Nop, no realmente.
La Srta. Watson dijo: “He visto a hombres ser frágiles e inseguros por un distorsionado sentido de lo que constituye ser un hombre exitoso. Los hombres tampoco gozan de la equidad de género. Usualmente no hablamos de los hombres siendo aprisionados por los estereotipos de género, pero puedo ver que lo están y que, cuando ellos sean libres, las cosas cambiarán para las mujeres como una consecuencia natural.”
Este mensaje es defectuoso y desafortunado. Decir a los hombres que deben interesarse en la inequidad de género por lo mucho que los afecta, convierte a los hombres y su beneficio en el centro de un movimiento creado por mujeres para sobrevivir en un mundo que nos degrada y nos deshumaniza diariamente. Esto es problemático por la misma razón por la que es problemático decir a la gente blanca que debe acabar con el racismo porque el racismo “nos retrasa como sociedad, así que erradicarlo les beneficiará también”.
Primero, porque aun cuando eso sea cierto, eso no promueve la solidaridad. Yo nunca he conocido a una persona blanca que haya decidido trabajar contra el racismo por los efectos negativos del racismo en la gente blanca. Literalmente, nunca. Y no creo haber conocido a un hombre que genuinamente apoye los ideales feministas por las maneras en que benefician a los hombres. Si conociera a gente así, no me agradaría. Me pregunto por qué la común y brutal opresión de la gente de color y las mujeres, y en especial de las mujeres de color, no es suficiente para que se interesen. Pero tener una epifanía sobre las formas en que los hombres y/o blancos se ven afectados por estos constructos, porque “algunos miembros de la sociedad y los hombres deben poder llorar también”, los hace saltar abordo de inmediato.
En segundo lugar, es desafortunado porque ignora lo mucho que los hombres se benefician de la inequidad de género (¡De veras lo hacen, Emma!) Permítanme ofrecer sólo un par de estadísticas:
1 de cada 5 mujeres estadounidenses han reportado un tipo de violación durante su vida. Para los hombres estadounidenses, es 1 de cada 71.
Las mujeres americanas blancas ganan el 78% de lo que ganan sus contrapartes masculinas. Las mujeres americanas negras ganan 89% de lo que ganan sus contrapartes masculinas y 64% de los que ganan los hombres blancos. Las mujeres latinas ganan 89% de lo que ganan los hombres latinos, y el 53% del sueldo de los hombres blancos.
Sólo el 4.8% de los 500 CEOs de Fortune son mujeres.
Por supuesto que la desigualdad en el salario existe en todo el mundo, incluyendo a Inglaterra. Al igual que la violación.
Decir que los hombres tampoco gozan de la igualdad crea la falsa narrativa de que todos somos afectados de la misma forma, en los mismos grados, por los males de la inequidad. Eso no beneficia a nadie y simplemente no es verdad. Que Emma Watson haya sido sexualizada a los 14 años por los medios de comunicación no es lo mismo que sus amigos varones no se sientan cómodos expresando sus sentimientos. Esa es una equivalencia falsa. Las maneras en que la inequidad de género es mala para hombres y niños es muy, muy diferente de las maneras en que es mala para mujeres y niñas. De hecho, oprime y abusa a las mujeres y niñas en casi cada faceta de su vida.
En tercer lugar, la gente más privilegiada es constantemente convertida en el centro de las conversaciones acerca de la opresión, y esto tiene que parar. Esa es la razón por la que el “matrimonio igualitario” es el asunto principal en lo referente a derechos de la comunidad LGBTQ, en lugar de los jóvenes queer sin hogar, en lugar de la invisibilización de los queer o trans de color. La cara del movimiento por el “matrimonio igualitario” es mayormente blanca, masculina y pudiente. La gente más privilegiada es colocada en el centro de la discusión, mientras que los más oprimidos se quedan en los márgenes, si bien les va. Descentralizar a las mujeres en la conversación sobre la inequidad de género no es bueno.
La Srta. Watson también dijo: “Deseo que los hombres tomen este manto. Así sus hijas, hermanas y madres podrán estar libres de prejuicios…”
El mensaje debajo de esto es que las mujeres merecen la equidad por su relación con los hombres. Continuar reforzando la idea de que los hombres deben respetar a las mujeres y pelear por la igualdad de la mujer porque son hijas/hermanas/madres/o lo que sea, perpetua la idea de que las mujeres no merecen derechos por el simple hecho de ser seres humanos. Ello impulsa a los hombres a pensar en las mujeres únicamente en relación con ellos, como si nuestra pseudo humanidad fuera una consecuencia de la humanidad real de ellos. Lo cierto es que las mujeres son personas completas, sin importar nuestro estatus en la vida de los hombres. Esto es lo que los hombres debieran escuchar una y otra vez. Esto es lo que todos debiéramos escuchar todos los días.
Creo que lo que la Srta. Watson parece entender, pero realmente no lo hace, es que la idea de feminidad, ya sea expresada por mujeres u hombres (o personas queer, pero quién sabe por qué ellos no existen en el discurso y la campaña de la Naciones Unidas) es el lado flaco del mundo. La feminidad es vista como debilidad y es odiada y abusada. Eso es válido y muy importante, pero ella no dijo nada al respecto. No parece tener aún un análisis sólido de eso. Y es posible sugerir que será lo que llegará a la mayoría de la gente que escuchó su discurso.
Entonces, ¿podemos por favor dejar de intentar convertir a Emma Watson en el nuevo icono feminista del universo? Ella aún no está lista. Creo que ella sigue aprendiendo, al igual que Beyoncé, quien, por cierto, rara vez recibe el beneficio de la duda de las feministas blancas, y mucho menos es aclamada como la reina feminista cuando sus expresiones feministas son menos que perfectas. (Imaginen a Beyoncé en las Naciones Unidas dando un discurso que centraliza al hombre en la pelea por la igualdad de género. Las feministas blancas nos acribillarían a todas. Bueno, al menos a algunas de nosotras).
Espero que mientras Emma Watson continúa desarrollándose en el feminismo, también descarte estos desafortunados acercamientos. Pero, francamente, me cuesta trabajo verla como la feminista que ha cambiado las reglas del juego, como ha sido llamada. ¿Dónde está su análisis sobre la justicia racial y la necesidad de terminar la desigualdad de género? ¿Qué sabe ella sobre la misoginia negra? ¿Comprende que las mujeres blancas adineradas son con frecuencia opresoras de las mujeres negras y/o pobres en el mundo? ¿Qué sabe del transfeminismo? ¿Puede explicar a las Naciones Unidas, o a cualquiera, por qué la violencia contra las mujeres trans necesita ser considerada en nuestro trabajo contra la misoginia? ¿Sabe y puede explicar que esto involucra no sólo la inequidad de género sino toda forma de opresión que existe? Y, sobre todo, ¿entiende ella que como mujer blanca tiene garantizado el ser tomada en serio por el feminismo dominante de maneras en que no pueden ser consideradas las mujeres de color y por qué, entonces es necesario que se haga a un lado y deje espacio para que las mujeres de color sean escuchadas, si es que la inequidad de género será alguna vez erradicada? Por cualquiera que realmente cambie las reglas del juego del feminismo necesita saber todo esto.
Personalmente creo que sería muy bueno que quien solía ser la niña que interpretaba a Hermione se convirtiera en una ruda feminista que cambiara el juego. Para mí, se requiere de un análisis y un acercamiento verdaderamente rudo. Y la Srta. Watson aún no puede brindarlo.